7 feb 2008

1, 2, 3...¿cuántos más faltan?

Tres partidos se han disputado contra Estados Unidos desde que Hugo Sánchez se convirtió en la cabeza del tricolor y ninguno de los resultados han salido a nuestro favor.

Escucho a los conductores de televisión y a los locutores de radio diciendo al público que debemos setirnos contentos y orgullosos pues México se paró mucho mejor en la cancha a comparación de los encuentros anteriores con Hugo en la banca, lo cual parece una ironía a la hora de contar goles a nuestro favor.

Tengo dos críticas que hacer de nuestra selección. La primera y la cual me parece la base de cualquier mal es el "Frankestein" que se intenta construir en cada juego. No hay continuidad, Hugo lleva ya un año y no ha podido encontrar a "la selección", en todos los juegos, a diferencia de Paco Memo y la defensa, de la media para adelante los convocados son diferentes.

Es curioso ver cómo llaman a unos a la selección por el excelente desempeño que realizan con sus clubes y al llegar al tri, no dan lo que todos esperaban ya que juegan otras posiciones o en otros sitios. Además insisto que lo más débil de México son los delanteros, los goles de ayer fueron a balón parado gracias a un defensa, esto sólo es reflejo de una liga en donde los anotadores de tantos vienen del extranjero.

En fin, tendremos que seguir esperando a que nuestro futbol crezca y madure para cosechar tantos y puntos.

2 comentarios:

RIGEL dijo...

Para lograr un equipo sólido es necesaria la continuidad. Por lo pronto, la selección de México, mediocre por antonomasia, continua con la racha negativa ante Estados Unidos, que a diferencia de nuestros connacionales, tienen grabada en su mente la idea de que son el mejor.

Famosa mentira siempre será "no importa ganar sino competir", puesto que lo único que cuenta finalmente es el resultado, no los "cómo" o los "casi".

Anónimo dijo...

Octavio Paz lo dijo bien en el Laberinto de la Soledad, a los mexicanos, más que el brillo de la victoria nos conmueve la entereza ante la adversidad.